¿Eres el general de tú empresa, de tú
equipo de trabajo, de tú casa, de tus compañeros de juego, de tú vida? Cerré el blog anterior planteándote estas
preguntas y una amiga me hizo favor de enviarme más cuestiones para reflexionar:
¿El líder nace o se hace? ¿El respeto se puede
imponer o se debe ganar? ¿Es una necesidad humana seguir y respetar a alguien?
¿Se puede distinguir a los ídolos que se crearon de barro, o si existe esa necesidad
es capaz de cegarnos?
Podría asegurarte que las respuestas que
has formulado a cualquiera de las preguntas anteriores, han traído varios
rostros a tú mente… políticos, jefes, maestros, padres y/o a cualquier ídolo o héroe
que te hubieras creado en cualquier ámbito, deportivo, histórico, artístico,
etc. Así que conserva esas imágenes y sigamos
conociendo la ideología que Sun Tzu expuso respecto al papel del General, a sus
atributos y su trascendencia para obtener la tan ansiada victoria (y que conste
que ya había pedido disculpas por el desorden de las ideas):
-Un general debe ser sereno (insensible a
la contrariedad), impenetrable (inescrutable), imparcial (justo) y dueño de sí
(Así no se confundirá).
Sabe
cuándo luchar y cuándo no.
Sabe
discernir cuándo utilizar muchas o pocas tropas.
Tiene
tropas cuyos rangos superiores e inferiores tienen el mismo objetivo.
Se
enfrenta con preparativos a enemigos desprevenidos.
Mantiene
en secreto sus formaciones y sus planes, permaneciendo insondable para los
enemigos, y espera a que se produzca un punto vulnerable para avanzar. –
Dicen y lo dicen muy bien, que nadie tiene
la verdad absoluta y debo asumir que esto también aplica al general Tzu. Pero cuando
una idea es compartida por otros, cuando se dice en idiomas diferentes, en
palabras diferentes, pero la esencia se conserva; podría acercarnos a un principio
más certero ¿no crees?
Cuando leo las características del General
de Sun Tzu, lo asocio con conceptos que tal vez ya escuchaste y que inclusive
podrías haber ya utilizado (no refiriéndome a las palabras, sino a las acciones):
Inteligencia emocional Capacidad
para reconocer sentimientos propios y ajenos, y la habilidad para
manejarlos, reconocerlos, crear la propia motivación,
y gestionar las relaciones.
Resilencia “Capacidad
de afrontar la adversidad saliendo fortalecido y alcanzando un estado de
excelencia profesional y personal. Desde la Neurociencia se considera que las
personas más resilientes tienen mayor equilibrio emocional frente a las situaciones
de estrés, soportando mejor la presión. Esto les permite una sensación de
control frente a los acontecimientos y mayor capacidad para afrontar retos”
(Instituto Español de Resiliencia).
En mi particular percepción de las cosas,
me parece que estos 2 conceptos no pueden estar separados, ya que ambos se
basan en el conocimiento de las emociones, para manejarlas en equilibrio, con
serenidad, para que como dijo el General Tzu, siempre seas dueño de ti mismo. ¿Sabías
que la resilencia, es una de las capacidades que las organizaciones actuales
demandan para lograr a través de los talentos que las integran, la flexibilidad
que exige el mundo actual?
Y si hablamos de emociones, entonces
hablamos de seres humanos. Y el General que nos describe Sun Tzu, lo entiende y
así se maneja:
-Cuida de sus soldados, como cuida de sus hijos, entonces ellos
darán la vida por él. Y si quiere a sus hombres de esta manera, obtendrá de
ellos el máximo.
Vigila
qué comen las tropas; no las hace trabajar sin objeto. Consolida la energía más
entusiasta de sus tropas, ahorra las fuerzas sobrantes y unidas bajo una misma
mística, las hace mantenerse fuertes.
Sitúa
a sus tropas en un punto que no tenga salida, de manera que tengan que morir
antes de poder escapar. Porque, ¿ante la posibilidad de la muerte, de qué hazañas
no serán capaces? Los guerreros darán lo mejor de sí. En una situación
desesperada no temerán a nada; si no hay retirada posible serán inquebrantable;
cuando están totalmente implicados en un terreno, se aferran a él. Si no tienen
otra opción, lucharán hasta el final.-
El General Tzu sabía que un trato de compromiso, respeto y
justicia, podría obtener lo mejor de sus tropas, al igual que obtiene lo mejor
de un ser humano. Pero también sabía que como humanos estamos llenos de
imperfecciones que influyen nuestras reacciones, y en las del General. Y por
ello nos advirtió tener cuidado en estas situaciones:
- Si el general no ordena con vigor y se
comporta sin dignidad, los oficiales se rebelarán. Si las ordenes no son
firmes, baja la moral de los hombres y sube la furia de los oficiales. Si las
órdenes siempre son justificadas y se ejecutan en todas las ocasiones las
relaciones entre el comandante y las tropas serán satisfactorias.
La
confusión del ejército conduce a la victoria del adversario. El que no tiene
claro sus objetivos, no podrá responder a su enemigo.
Si
se castiga a los soldados antes de haber conseguido que sean leales al mando,
no Obedecerán, y si no obedecen, serán difíciles de utilizar. Si las tropas son
fieles pero no se les castiga, son inútiles.
Las
recompensas no deben utilizarse solas, ni debe confiarse solamente en los
castigos. En caso contrario, las tropas, se acostumbran a disfrutar o a quedar
resentidas por todo. Esto es dañino y los vuelve inservibles. Sí el código de
recompensas y castigos es claro y se aplica de inmediato, podrás manejar a
muchos como si fueran unos pocos.-
Y no menos importante, distinguió 5 rasgos peligrosos en un General: -Los que están dispuestos a morir,
pueden perder la vida; los que quieren preservar la vida, pueden ser hechos
prisioneros; los que son dados a los apasionamientos irracionales, pueden ser ridiculizados;
los que son muy puritanos, pueden ser deshonrados; los que son compasivos,
pueden ser turbados.-
Desearía que se multiplicará El Estratega, El General, El Respetado
que describe el libro “El arte de la Guerra” y considero que desarrollar la
capacidad de Resilencia, puede ser un buen comienzo, no solo para cosechar
victorias, sino para tener una mejor vida. Así que ¿empezamos de una vez?
Para concluir, si algún día estuvieras
inmerso en alguna batalla; no olvides que la flexibilidad, tolerancia y
adaptación, pueden ser tus armas más importantes.
“El que vence modificando su estrategia, según la condición de su enemigo, debe ser considerado un experto en el arte de la guerra.”
Sun Tzu en El arte de la Guerra
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